Ya hemos hablado de la importancia de la confianza y la optimización para conseguir el éxito en Internet y mejorar la conversión de nuestra página web.  Estas condiciones necesarias se pueden alcanzar con un breve listado de recomendaciones prácticas, muy fáciles de implementar en cualquier web.

A la hora de crear un sitio web debemos tener en cuenta las diferencias entre el comercio electrónico y el comercio tradicional para convertir las debilidades en fortalezas y las amenazas en oportunidades.

COMERCIO ONLINE COMERCIO OFFLINE
Entorno más rápido Entorno más lento
Interacción virtual Interacción cara a cara
Inversión más baja Inversión más elevada
Mercado global, no limitado al entorno físico Tráfico limitado al entorno físico
Espacio del lineal ilimitado Espacio del lineal limitado
Mayor fraude en los pagos Menor fraude en los pagos
Venta 24×7 Venta limitada al horario comercial

 

Basándonos en esta comparativa, no resulta difícil trabajar en algunos aspectos prácticos que ayudarán a que cualquier página web mejore sus resultados (páginas vistas, ratios de conversión, ventas…)

a)    La confianza es clave al generar un acuerdo de compra. Los internautas no compran en Internet porque, principalmente, “no se fían”,  de lo que ocurrirá con sus datos personales o cómo llegará la mercancía, por citar dos dudas muy comunes. Así que podemos:

  1. Utilizar un buen nombre de dominio. Corto, fácil de recordar, vinculado al producto, empresa o marca.
  2. Eliminar gastos de envío. Nuestros clientes hacen e-shopping cómodamente, pero se calcula que un 81% declina hacerlo virtualmente por los gastos de envío extras. Además, nos diferenciamos de nuestros competidores.
  3. Ofrecer información completa sobre la empresa y sus productos. Pon a disposición del internauta información relevante sobre la empresa y productos, sin ser parcos. No hay que olvidar que el cliente, al comprar, ofrece muchos datos personales, y el 64,7% tiene miedo a darlos por Internet.
  4. Activar un servicio de atención al cliente. Debemos poner todo nuestro interés en buscar la satisfacción del cliente por diferentes canales, antes del proceso de compra, durante el proceso de entrega de los productos e, incluso, después.
  5. Dar una perfecta “primera impresión”. Nuestra empresa y productos deben presentarse en un diseño web cuidado, donde se vea un gusto por los detalles. También hay que poner atención a la facilidad de uso y navegación.
  6. Ofrecer “supergarantías” muy por encima de lo esperado por el cliente. Y por supuesto, muy por encima de los mínimos legales. Con ello se transmite que confiamos tanto en nuestro producto que no nos importa ofrecer algo exagerado porque sabemos que el cliente no lo va a necesitar. Hay que dar una razón para comprar ahora.
  7. Transmite seguridad para los datos. Imprescindible utilizar páginas en un entorno seguro (SSL) cuando se solicitan datos personales, que hagan que el cliente confíe en un trato de sus datos con la máxima seguridad, pues a un 58,8% de los internautas le sigue pareciendo inseguro comprar vía online. 
  8. Eliminar sus objeciones antes de que las tenga. Ofrece información sobre los procedimientos necesarios a la hora de hacer la compra y los motivos.

 b)    En cuanto a la optimización permanente, basta con “estar atento a la situación” y en cómo intentar mejorar nuestra página web. Estas serían las recomendaciones prácticas:

  1. No opinar: probar y comprobar. Repite el proceso repetitivo de observación de la situación, prueba de alternativas y medición de resultados.
  2. Orientar el mensaje clave. La claridad de nuestra página web hacia el producto que queremos dar a conocer es fundamental para no desviar la atención ni la conversión desde los buscadores.
  3. 100% de compatibilidad. Tanto en los navegadores como en los sistemas operativos para que cualquier usuario pueda acceder a tu web.
  4. Utilizar herramientas de analítica web. Facilitan las labores de observación, que combinadas con herramientaas de optimización permiten probar fácilmente y comprobar qué modificaciones optimizan nuestros resultados.
  5. Eliminae distracciones. Existe un grupo de 13,3% de usuarios online que encuentran complicado comprar por Internet. Se debe buscar la accesibilidad mediante un mensaje claro y un buen diseño de la web.
  6. Botones grandes. Deben ser visibles para que los usuarios de nuestra web no desvíen la atención ni pierdan tiempo a la hora de realizar las compras.
  7. No pidas lo que no necesitas. Un 30,8% de los internautas desconfía de la información suministrada, por lo que se debe asegurar pedir y justificar los datos estrictamente necesarios.
  8. Si no te mueves, estás retrocediendo. El proceso no tiene fin, porque el entorno evoluciona (las preferencias de los clientes, la competencia). Busca indicios y no tengas miedo a la prueba, porque con frecuencia la realidad será diferente de lo que tú habrías imaginado.

Lógicamente, este listado de recomendaciones puede aumentarse tanto como queramos, pero, sin duda,  ofrecen una buena base para que cualquier página web pueda triunfar en Internet. Y, por supuesto, son recomendaciones que resultan muy fáciles de implementar, tanto si realizamos nuestra página con aplicaciones como WebMaker y Tiendas Online o si tenemos conocimientos de programación y hemos creado nuestra propia web y está alojada en un Plan de Hosting.